Las ventas minoristas, de mal en peor. En febrero, el Índice de
Comercio al por Menor (ICM) registró una caída anual a precios
constantes del 10,6%, frente al 8,8% de reducción registrada el pasado
enero, y descendió además en todas las comunidades autónomas españolas.
Con el resultado de febrero, el ICM acumula ya 32 meses a la baja.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el consumo de productos de equipamiento personal, donde se inscriben los artículos del sector de la moda, mejoró su evolución en febrero, con una caída anual a precios constantes del 8%, un punto menos que en enero.
Además de caer en todas las comunidades autónomas, las ventas descendieron en febrero en todos los formatos comerciales. Las grandes cadenas volvieron a ser, de nuevo, las que registraron el resultado menos malo, del 4,1%, mientras que la caída llegó al 10,5% en las pequeñas cadenas, al 11,1% en las grandes superficies y al 12,6% en las empresas unilocalizadas.
En términos de ocupación, la caída en el comercio fue del 2% anual y sólo las grandes cadenas generaron empleo, con un alza del número de trabajadores del 0,4%. En el resto de canales comerciales, el empleo cayó un 4,8% en las pequeñas cadenas, un 2,3% en las grandes superficies y un 1,8% en las empresas unilocalizadas.
Por comunidades, las peor paradas fueron Comunidad Valenciana, Castilla y León y Galicia, con caídas en las ventas minoristas del 13,7%, el 13% y el 12,9%, respetivamente. Otras siete autonomías evitaron las caídas a doble dígito: La Rioja, Madrid, Extremadura, Cantabria, Canarias, Asturias y Baleares, la mejor parada, con una caída de ventas del 6,8%.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el consumo de productos de equipamiento personal, donde se inscriben los artículos del sector de la moda, mejoró su evolución en febrero, con una caída anual a precios constantes del 8%, un punto menos que en enero.
Además de caer en todas las comunidades autónomas, las ventas descendieron en febrero en todos los formatos comerciales. Las grandes cadenas volvieron a ser, de nuevo, las que registraron el resultado menos malo, del 4,1%, mientras que la caída llegó al 10,5% en las pequeñas cadenas, al 11,1% en las grandes superficies y al 12,6% en las empresas unilocalizadas.
En términos de ocupación, la caída en el comercio fue del 2% anual y sólo las grandes cadenas generaron empleo, con un alza del número de trabajadores del 0,4%. En el resto de canales comerciales, el empleo cayó un 4,8% en las pequeñas cadenas, un 2,3% en las grandes superficies y un 1,8% en las empresas unilocalizadas.
Por comunidades, las peor paradas fueron Comunidad Valenciana, Castilla y León y Galicia, con caídas en las ventas minoristas del 13,7%, el 13% y el 12,9%, respetivamente. Otras siete autonomías evitaron las caídas a doble dígito: La Rioja, Madrid, Extremadura, Cantabria, Canarias, Asturias y Baleares, la mejor parada, con una caída de ventas del 6,8%.
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